En nuestro país tenemos una inmensa variedad de especies de pescado y marisco para escoger. En muchas ocasiones, no nos damos cuenta de lo afortunados que somos, y no tenemos en cuenta que en otros países de la Unión Europea tienen que escoger prácticamente casi siempre entre 3 ó 4 especies, como la caballa, el salmón o el atún.
España es un país que posee una tradición gastronómica fuertemente ligada a los productos pesqueros, pudiendo encontrar un sinfín de elaboraciones para la enorme variedad de especies que poseemos. Además a estas alturas ya nadie duda de que el pescado es básico en una dieta equibrada, y que es una fuente de proteína que debemos consumir de 3 a 4 veces a la semana.
Gracias a esta diversidad podemos disfrutar de numerosos productos pesqueros, no sólo gastronómicamente, sino que también podemos aprovechar los beneficios que nos aportan. En este post os daremos unas pautas para elegir vuestro pescado en función de las necesidades específicas que tengáis. ¿Quieres saber cuál es el tuyo?
- Si el gimnasio es tu santuario: Si eres de esos o esas muy preocupados por la forma física, ya os adelantamos que el pescado es vuestro alimento. Si lo que deseáis es incrementar vuestra masa muscular, el pescado os puede ayudar, ya que os aporta proteínas de elevado valor biológico, es decir, estas proteínas son absorbidas fácilmente por nuestro cuerpo, y pasan a formar parte de los tejidos. El tejido muscular es un tejido formado principalmente por proteínas, por lo que os recomendamos pescados como el atún que tiene un elevado contenido proteico.
- Si estás en plena operación Bikini:Tenemos buenas noticias para aquellos que estéis decididos a ser la envidia de toda la playa este verano, y es que no tenéis por qué sufrir con dietas extremas. El pescado es vuestra solución, en este caso en especial el pescado blanco. El pescado blanco tiene un bajo contenido calórico, sin embargo aporta proteínas de alta calidad, además de diferentes minerales o vitaminas lo que nos viene muy bien para que nuestro cuerpo siga en perfecto funcionamiento a la vez que estamos a dieta. Entre los pescados blancos podemos encontrar la merluza, el rape o el besugo, y como curiosidad os diremos que por ejemplo el bacalao contiene buenos niveles de yodo, muy importante para la glándula tiroides, que es la que produce hormonas relacionadas con el metabolismo.
- Si el médico te ha dicho que tienes el colesterol alto: Si el médico te ha pegado un buen tirón de orejas porque no consigues reducir el colesterol, no te preocupes porque tenemos varios consejos para tí. El pescado, en especial el pescado azul es fuente de Omega-3. Este ácido graso polinsaturado nos ayuda a reducir el colesterol y la trigliceridemia. Además existen numerosas elaboraciones deliciosas, que se pueden tomar a modo de tapa o aperitivo y que nos van a ayudar a reducir los niveles de colesterol. Existen estudios que han demostrado que consumiendo pescado (en especial pescado azul) de 3 a 4 veces a la semana reducimos el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Entre los pescados azules tenemos las sardinas y los boquerones, el atún, el salmón o la palometa.
- Si estás de exámenes y ya no puedes más: Todos aquellos que estéis estudiando debéis saber que el pescado os puede ayudar y mucho. El pescado ayuda a fortalecer la memoria y a mejorar la atención. En este caso recomendamos un consumo equilibrado entre pescado blanco y azul a la semana.
- Si vas a ser mamá: El pescado es muy necesario para el desarrollo fetal. El ácido graso Omega-3 que contiene el pescado favorece el desarrollo cerebral y retiniano del futuro bebé. Además es igualmente importante en la alimentación de los niños ya que favorece el desarrollo cerebral y mejora el desarrollo cognitivo y social.
Ya véis que tenemos solciones para cualquier situación, así que no olvidéis que para mantener una dieta saludable el pescado es esencial, es también muy importante para los más pequeños de la casa y debemos consumirlo de 3 a 4 veces a la semana.